Las mascarillas quirúrgicas son dispositivos médicos desechables. Protegen contra los agentes infecciosos transmitidos por gotitas. No obstante, no protegen contra los agentes infecciosos de transmisión por vía aérea. Por tanto, no evitarán la exposición del usuario a una posible contaminación potencial por virus.
Las mascarillas quirúrgicas tienen dos funciones:
- Evitar la proyección de gotitas de saliva o secreciones de las vías aéreas durante la espiración del usuario. En caso de utilización por parte del personal sanitario, las mascarillas quirúrgicas protegen al paciente y su entorno (aire, superficies, material, campo operatorio). En caso de utilización por parte del paciente portador de enfermedades contagiosas, evitan que el paciente contamine su entorno y el ambiente que lo rodea.
- Proteger al usuario de infecciones transmisibles por gotitas o de proyecciones de líquidos biológicos. En este último caso, las mascarillas quirúrgicas deben disponer de una película impermeable. También pueden venir equipadas con una visera para proteger los ojos.